Grandes bancos y empresas de bebidas dan los primeros pasos para entrar de lleno en este negocio.
Los asistentes al Congreso Mundial del Cannabis celebrado en Los Ángeles escuchaban una de las conferencias inaugurales cuando una noticia comenzó a saltar en los teléfonos. El regulador federal de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) acababa de aprobar un nuevo producto llamado Epidiolex para tratar la epilepsia.
El fármaco se basa en el CBD, un compuesto del cannabis con propiedades analgésicas. Las acciones de la empresa que lo fabrica, GW Pharma, subieron un 6,2 por ciento. Concretamente, el regulador vino a decir que los medicamentos aprobados con CBD serán considerados dentro de la categoría de peligrosidad mínima.
Para los presentes en esta reunión bianual de industrias relacionadas con el cannabis, la noticia fue una nueva señal, una más, de que están en el negocio adecuado en el momento adecuado.
La reclasificación del compuesto CBD se suma a otra serie de pasos, como el interés de grandes conglomerados de bebidas en el mercado de los derivados del cáñamo y el cannabis, además de los grandes bancos de Wall Street que están estudiando de cerca la industria.
Hace dos años que los aspirantes a ser los primeros millonarios de la marihuana citan 2018 como el año en el que va a cambiar todo gracias a la legalización del uso recreativo en California, el mayor mercado legal en el mundo con 39 millones de habitantes, y en Canadá.
Y, efectivamente, todo parece a punto de cambiar. Pero, al mismo tiempo, la nueva regulación no llega todo lo rápido que el acelerado crecimiento del negocio parece estar demandando.
julio pasado, la canadiense Tilray se convirtió en la primera empresa cotizada en el Nasdaq que se dedica a producir marihuana para uso medicinal. Debutó a 17 dólares. La semana pasada estuvo por encima de 130 dólares por acción.
En agosto, el gigante de las bebidas Constellation Brands anunció una inversión de 4.000 millones de dólares en Canopy Growth, una empresa canadiense de cannabis. Se trata de la mayor apuesta que ha visto hasta ahora la industria de la marihuana. Por comparar, es la cantidad por la que Disney compró la marca Star Wars.
Todo esto sucede en Canadá, que el próximo 17 de octubre va a legalizar también la marihuana de “uso adulto”, como llama la industria el uso recreativo. Es el segundo país en hacerlo, tras Uruguay.
En Estados Unidos, la marihuana sigue siendo una droga prohibida a nivel federal con la misma clasificación que la heroína. Esto hace que los bancos no puedan trabajar con ese negocio. Pero en Canadá sí.
Fuente: El Tiempo
Por: Pablo Ximénez de Sandoval, Ediciones El País